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Showing posts from February, 2012

Primavera salvaje

(2009) Una cúpula se forma con las manos Acoge la llama del fuego anónimo Marea de aromas que se elevan sigilosos Desde los vértices ardientes de una esquina desolada Quizás en busca de un pasaje hacia otra zona Más afable, más dulce, más candente El ígneo deseo ignorado naufragaba En las aguas desorientadas de la inocencia Reminiscencias bruscas de una primavera salvaje Traspasan la espesura pringosa de los años, El nacimiento de símbolos vestales En el útero sangrado de sombras diáfanas Máscaras concebidas en el núcleo de nubes circulares Bajo la lumbre segregada de lunas ciegas En ciclos constantes que el intelecto no adivina: Signos elocuentes en los contornos de tu lengua Quizás en busca de un paisaje, de otra región Más abierta, más feroz, más pedregosa Ensueño de caminantes que renuncian Al templo profano de las formas

Juventud

(2012) Juventud es una novela con tinte autobiográfico del escritor sudafricano Coetzee, ganador del Premio Nobel de Literatura. Relata la historia de un joven de 20 años que busca su lugar en el mundo. Con una prosa armónica y una conciencia metafísica del mundo, con preguntas filosóficas propias de un escritor con letras mayúsculas, el libro no dejará a nadie indiferente. Uno se sentirá reflejado en el personaje, sentirá que las experiencias que éste vive en su interior uno ya vivió en aquella época donde todo resultaba una novedad, el mundo era un irreverente remolino de ansiedades y no había rey que abaratara la voluntad divina de cambiar ese mundo. Los invito a acercarse a este libro y dejarse llevar por el encanto de esta gran pluma sudafricana.

El Príncipe de las Mareas

(2012) El hombre se interroga pero Dios decide cuándo matar al Príncipe de las Mareas Les voy a contar una pequeña anécdota relacionada con este libro. Me referiré a cómo lo conseguí y por qué hay todavía lugar para la esperanza, por qué podemos todavía creer en la bondad de los hombres. Hace dos meses fuimos a ver una obra de teatro a una sala pequeña llamada El Caldero de Oro, frente al río Manzanares. En el descanso de la obra, nos sentamos en una de las mesitas a beber una cerveza. Al lado nuestro, contra la pared, había una hilera de libros que formaban una pequeña biblioteca. Entre ellos estaba El príncipe de las mareas. Movido por una repentina curiosidad, leí la primera página. El tono de la primera página de cualquier libro nos indica lo que sucederá después. Esa primera página me atrapó por su narración musical y poética a la vez. Días después de aquella noche, decidí buscar ese libro: quería leerlo. Los impulsos no nos definen, pero indican en qué frecuencia estamos. Ese imp