(2015) Es algo que forma parte de una atracción más animal. Es un pájaro que nace en tu estómago, sube por tu garganta y emprende su vuelo dejando plumas en tu boca, entre tus dientes. Es el león que ruge en la soledad de una celda. Es la soledad de los amantes después de la cópula. Es el rostro blanco bajo la luz mortecina de un farol. Es esta mano que busca retener lo perdido. Es una columna de acero, una biblioteca cubierta de flores. Es su sexo cálido, sus senos lechosos, sus brazos femeninos rodeándome. Es su boca marítima, su aroma a tierra y cielo, luz de aguacero. Es mi corazón que late, que renace, que golpea mi pecho, que revoluciona mi conciencia. Es la conciencia del tiempo que pasa, del día que cede a la caricia de la noche en su lenta rutina petulante. Es la camelia en su ojal y las macetas en el patio. Es el olor de los bebés recién nacidos. Es la nada, la cuerda de la cordura y la tiránica sed de los artistas. Es la silla de dos patas y el piso de madera. Es el estad...
Fragmentos de una vida pasajera y sus múltiples identidades